POESÍA CONFESIONAL * Aquí resuena subterránea, la voz de mis demonios, ecos de sombras del pasado, sonidos de la oscuridad de un futuro que nunca llegará, dolor del presente inexistente siempre habitando la sangre, mordiendo los sentidos. Por encima de la oscuridad se impone un mundo nacido de los sueños, construido con manos amorosas, un bosque habitado por seres mágicos, un universo sin sombras ni dolor, un mundo alojado en la profundidad de una mirada sin límites. Escribo sobre este mundo, hecho sobre todo con la materia de los sueños de un ser que nació poema y se convirtió en mujer. También describo las sombras que habitan a los seres humanos, sus demonios, su dolor, sus pesadillas, la oscuridad, como una forma de mantenerlos alejados, prisioneros en su noche eterna.

martes, 2 de febrero de 2021

En pandemia

 


Te has ido sin palabras, sin aliento.

Me he quedado en silencio, sin consuelo.

¿Qué hacer con el adiós que no pudo ser,

la despedida imposible?

¿Qué hacer con las palabras de amor

que no pude pronunciar,

que no podrás jamás oir de mis labios,

ahora lacerados por el dolor?

Se me pegan gélidas,

como cristales de hielo, a la piel del alma.

Caen letra a letra sobre mi, hirientes;

crecen como la nieve, cada segundo más frías.

Inmóvil, sin fuerzas, te recuerdo como eras,

como serás para mi;

hasta que parta para siempre,

como una despedida imposible.


©